Estados Unidos: los conductores de taxis se colocan el cinturón de seguridad para salvaguardar sus trabajos, no sus vidas
Un cartel dentro del vehículo indica: "La ley del Distrito de Columbia requiere en carácter de obligación el uso del cinturón de seguridad. Su no cumplimiento lo hará pasible de una multa de US$ 50.-"
El cartel no especifica nada acerca de los "dos puntos" en la licencia, pero los conductores de taxis coincidieron en afirmar que esos dos puntos pesaban más que los US$50,- en la decisión de usar su cinturón de seguridad.
La nueva ley entró en vigencia en Abril de l997 y un estudio realizado comprobó que un año después de la promulgación de la ley, el 74% de los conductores de taxis llevaban abrochado su cinturón de seguridad.
Los "dos puntos" son los que más inciden para que la ley se cumpla.
Oladapo Akinwale, que conduce su taxi en Washington, al ser consultado reconoció: "Si no usas el cinturón, la policía te hace una multa y te da dos puntos en tu licencia; cuando vas a renovarla debes estar por debajo de los "siete puntos", si estás por encima , pierdes tu trabajo".
La regulación especifica que los conductores que acumulen más de 7 puntos en tres años serán suspendidos por 90 días. Si en ese lapso acumulan más de 12 puntos se les podrá revocar la licencia por 180 días.
Pero la realidad es que casi ningún taxi ni remise tienen disponibles los C. de S. para los pasajeros; y en los pocos casos en que están usables, se tratan, las más de las veces de cinturones de cintura y fijos, que no son los ideales, menos aún en un auto de uso público. Muchos son los pasajeros muertos o gravemente heridos en taxis y remises, víctimas de graves violaciones a normas de seguridad por "seudos profesionales" al volante, en vehículos sin cinturones de seguridad para el pasajero, y en los cuales, muchas veces no funcionan las trabas en las puertas. El control del cumplimiento de las normas básicas de seguridad en taxis y remises es imprescindible para mejorar la Seguridad Vial, (no solo por la seguridad de los pasajeros en si, sino también por el mal ejemplo que brindan los mal llamados "choferes profesionales", y que poco tienen de ello, al resto de los conductores)